jueves, 25 de agosto de 2011
El, mi suspiro.
No, no esta, pero le sientes, si, esta, pero no le ves. No hay un motivo, hay muchos. Navega contigo, se mueve con el aire, se mueve a un lado y al otro, tiene hambre tiene sed de ti. No quiere un beso quiere miles, no quiere un silencio quiere un grito, un grito de felicidad un suspiro por haberlo conseguido, un beso por hacerlo realidad y una caricia para demostrar que lo volverá a hacer si es necesario. No es una sorpresa si te manda rosas, no es una sorpresa si te dice te quiero, te amo, porque ya estas acostumbrada, acostumbrada a verle llorar por conseguir el éxito de tu amor y por ganar el trofeo de un boxeador, porque se rompió las manos por protegerte, porque escalo montañas para llegar a ti, porque no te dejo caer, sino antes te elevo a lo alto y te escribió en el cielo: eres un ángel que jamas dejare caer.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario